En nuestra actitud radica el cambio. Tomar a la vida tal y como es, es nuestra responsabilidad desde el adulto consciente y presente, que asume lo que le toca. Podemos reaccionar desde la rabia y el enojo que nos conduce al resentimiento o al sufrimiento de no aceptar a las circunstancias o personas, lo cual nos dejará anclados al pasado y al dolor o por el contrario responder mirando hacia adelante, hacia la vida con eso que nos ha tocado vivir y decidir aceptar eso desde el Amor y el Si a todos y a todo como es.
Desde la visión Sistémica, como camino de trabajo y crecimiento personal, cuando nos sentimos excluidos más allá de reprochar, recriminar, repudiar o cualquier otra acción propias de la respuesta humana y emocional a partir de un sentir o vivencia dolorosa, por incomprensible que nos resulte, darnos cuenta que yo también excluyo inconscientemente, que es parte de ese equilibrio entre el dar y el recibir. Reconocer, darnos cuenta que todos somos iguales, reconocernos en el otro conscientemente y establecer nuestra mirada y acciones encaminadas a:
✅Comprender que es necesario el destierro para la propia evolución
✅Agradecer lo que me han dado y hacer lo que hagamos en su memoria
✅Respetar sus costumbres y su manera de ver la vida sin hacer juicio de ellos
✅Construir nuestro propio legado con eso que nos han dado y con nuestra propia experiencia para la siguiente generación.
Recordar siempre que la vida no se detiene y que siempre va hacia adelante. Debemos seguir nuestro camino con un corazón humilde por todo lo recibido, reconociendo que no hubiese sido posible sin ellos.
Aunque ilusamente creo que me separo de mi familia o que ellos se separan de mi y que lo hago diferente a ellos, un día descubriré que en mi sistema familiar siempre prevaleció el servicio. Entonces, en ese momento, comprenderé que jamás me fui, jamás fui desterrado o desterrada…simplemente extendí el territorio.
El destino individual está al servicio del destino Colectivo.
» La vida no da vueltas para castigarte, solo te muestra todas las capacidades y posibilidades que desconoces de ti, para estar aquí y ahora.»
Hola.escribe Verónica..
Lamentablemente, siempre eh vivido la exclusión en mi família y ahora en la familia de mi pareja. Cada vez me duele mas..
hola. me llamo cele creo que siempre me eh sentido excluida en mi familia capaz que no lo hagan intencionalmente pero ahí momentos que quisiera alejarme de todo esto y olvidar pero me doy cuenta q todavía falta para ser independiente… Y en esta forma me siento cómoda de expresarme xp no lo encuentro otra forma creo q seria una manera de sincerarse sin sentirme culpable x lo q dirán los demás…
Hola Cele, comprendo tus sentimientos, son comunes en el ser humano. Cada vez que una persona desea alejarse del grupo al que pertenece-grupo que le daba seguridad e identidad hasta entonces- se dispara en ella una reacción hormonal muy desagradable, una emoción a la que hemos dado el nombre de culpabilidad o mala conciencia, reacción que desaparecerá en cuanto la persona renuncie a su afán de autonomía y vuelva a pertenecer como antes. Toda apertura a algo nuevo es vivida por ese grupo como deslealtad a los orígenes porque esta apertura pone en peligro la estructura construida gracias a la sumisión, tanto obligada como voluntaria, de muchos individuos. Pero esto es un comportamiento macrosocial reconocido en las tribus para su supervivencia, que la humanidad ha vivido durante miles de años, y se nos ha grabado a fuego y sangre en el inconsciente humano y colectivo. Crecer, ser autónomo e independiente, significa soltar, crear algo nuevo, recoger con agradecimiento lo ofrecido, que se nos ha dado y ponerlo al servicio de la vida y de lo nuevo. El sentimiento de culpa es infructífero y solo nos hace paralizarnos y sufrir sino lo comprendemos. Podemos aprovechar ese sentimiento de culpa como un motor creativo y un impulso para asumir nuestra responsabilidad y actuar desde nuestra parte adulta. Espero te haya dado un poquito más de luz.
Hola, tuve problemas en mi familia paterna por parte de una de mis tías, me explico: Soy la pequeña de mi familia, siempre he sentido que me doy cuenta de cosas que no me gustan o que no entiendo y que mi familia o no se da cuenta o no le da importancia. Yo con la tia que menciono no me llevo muy desde pequeña pero siempre he pasado de ella para evitar conflictos hasta que un verano decidieron mis padres que fuera con mi madre, mi abuela materna y yo de veraneo. Ese verano empezo el conflicto porque me queria mandar todo el rato y yo ya tenia una edad, no me dejaba fumar y me trataba fatal y yo me case y la conteste y dejo de hablarme… A sí los dos años siguientes y el ultimo que fuimos se enfado el 3 día porque no le ofrecí un helado que no ofrecí a nadie, excepto a mi abuela porque ella no lo puede coger por si misma, pues la pedí perdón al instante y le dijo mi madre ya te pidió perdón y te ofreció traerte otro y ella le dijo que es que las cosas duelen y que ahora no lo quiere y yo ya me cabree y solo la dije »que pasa? que quieres bronca?» dejo de hablarme los 12 días que quedaban, inventando se cosas, saliendo a correr a fregar sus cosas ect. Paso el tiempo y pensaba que se habia calmado, le había puesto la tele y ayude en cosas y bueno mi pareja y yo decidimos ir al pueblo a probar (porque el estuvo presente y tampoco le hablo en esos verano cuando el no tiene la culpa de nada). Al llegar ya tenia mala cara, horroroso, metiendo se conmigo todo el rato, mi novio alicinando y yo callada, me dejo de hablar por decirla que pare y nos fuimos antes porque mi novio no aguantaba más la situación. Dejamos de verla tiempo y mi padre me convenció en ir al pueblo de mi tia prima con ellos (mi padre y ella) y estuvo bien y hablamos y todo, así que como tonta volvi al pueblo con ella (sin mi pareja) y con la política y todo a los días después de aguantar que me dijese cosas, me intentara aleccionar etc, solo porque tenia la política a todo volumen en el desayuno y me fui a desayunar al otro salón tranquilamente, diciendola con anterioridad buenos días etc, se mosqueo y se lo dijo a mi padre y mi padre me pregunto y le dije »es que esta con la política y no quiero ver eso» y mi padre se lo tomo bien y se lo dijo y ella le dijo »ya..» que se creía que no la oía. Desde ese momento me dejo de hablar y se metía más a por mi en lo malo y no me miraba ni nada… No se que hacer pero ahora la excluida de la familia soy yo, se han ido al pueblo, yo no fui pero mi hermano si, cuando digo de ir mi madre dice que mejor que no porque la casa es de ella y yo la entiendo, es ir yo y ella ya la lía y no es capad de decir que no quiere que vaya yo y mi gato… En fin, como dije, soy la excluida porque ella se agarra a que es mayor y esta torpe y no se la puede dejar sola y que la casa es suya…
Querida, gracias por tu compartir. Desde la mirada sistémica, la realidad que vivimos está movida por la realidad profunda que es la dinámica que predomina y no solemos conocer ni ver.
Los conflictos que tenernos en nuestro día a día, pone de manifiesto el desorden interno del individuo conforme a su sistema. Cuando alguien es excluido puede estar reemplazando a alguien que lo fue, aunque no lo hayamos conocido, al que por lealtad arcaica e infantil le hemos dicho “yo como tú”. El excluido necesita ser visto e incluido y con nuestra decisión precoz vivimos como el la exclusión.
La realidad que vivimos es el espejo de lo no resuelto en el sistema familiar de origen y entramos en proyecciones. Darse cuenta y salir de esas dinámicas ocultas requiere que la persona se sitúe en su parte “adulta” y se desidentifique del estado “niño”. Para poder ver la dinámica y dejar de hacer hipótesis las nuevas constelaciones familiares cuánticas nos ayudan a comprender y ver más allá de la mente y las formas, llevándonos a la sanación y liberación. Espero haberte dado un poco de luz.
Quedo a tu disposición para cualquier duda o aclaración, también puedes mandarme un email a mariajose@ahorayo.com. Gracias.